El monstruo del Mar Caspio

Los diseñadores de aviones rusos siempre se destacaron por su creatividad inventando máquinas excepcionales mediante soluciones que parecían imposibles para los diseñadores de occidente.
Uno de los conceptos más extraños jamás creados por los rusos fue la Ekranoplan: un avión experimental de efecto suelo - si en realidad se puede llamar así - que vuela, lógicamente, cerca del suelo 
El concepto en sí ya era bien conocido en la teoría, pero hay que dejar a los rusos tomar las riendas para que una idea loca se haga realidad.
Un ekranoplano es un vehículo parecido a un avión, aunque casi nunca sale de la influencia del efecto suelo, donde vuela sobre un colchón de aire de manera similar a como lo haría un aerodeslizador.

En la década de 1950, el ingeniero Alexeyev Evgenievich Rostislav diseñó una máquina que tenía alas muy cortas, que le permitían volar a una altura muy baja - desde 30 cm a 3 metros como máximo - aprovechando el efecto suelo, es decir con un " cojín de aire "entre las alas y el suel. Estos aviones estaban destinados a volar cerca de una superficie plana (normalmente agua) a altas velocidades, por lo que eran muy difícil de ser detectados pormedio del radar. Su nombre Ekranoplan (en ruso: экраноплан) se deriva de la palabra rusa para el efecto suelo (экранный эффект).

Los Ekranoplans creados en ese entonces eran excepcionales, y causaron asombro cuando finalmente fueron descubiertos por Occidente. Los satélites estadounidenses detectaron uno de estos aviones en el Mar Caspio en 1971 y los analistas militares del Pentágono fueron incapaces de clasificarlo. Era algo diferente a todo lo que habían imaginado, por lo tanto, lo llamaron el "Monstruo del Mar Caspio".

De hecho, el Monstruo del Mar Caspio era el Ekranoplan KM construido en 1966, con casi 100 metros de longitud, un peso máximo de despegue de 544 toneladas, y 10 motores turborreactores. Era una cosa gigantesca, de 30 metros de largo y 170 toneladas, mucho más pesado que un Boeing 747, que en ese momento no era más que un borrador de proyecto. Fue diseñado para volar a una altitud de 5-10 metros del suelo y a una velocidad máxima de 500 Km / h. Sólo un KM fue construido, y se estrelló cuando fue golpeado por una fuerte ráfaga de viento lateral que lo desestabilizó . El piloto, desobedeciendo las instrucciones, intentó levantar el avión en vez de bajarlo, lo que le hizo perder estabilidad y lo estrelló contra el mar, donde aún se encuentra sumergido ya que es demasiado pesado para rescatarlo.

Cuando terminó la Guerra Fría los Ekranoplans ya no eran utilizados en Rusia. El  problema en el desarrollo de estos aviones era que, debido a su baja altitud de vuelo y altas velocidades, eran muy difíciles de probar - especialmente en las zonas pobladas lindantes a los cuerpos de agua utilizados. 

Si bien resulta llamativo e interesante, el concepto de un avión de vuelo rasante no deja de ser por lo menos delirante.

Taluego