Necesitamos platos

"Suculentos pasteles de carne frita repulgados a mano, sobre fino colchón de hierbas y magia de vidrio reciclada" La humorada no me pertenece pero acompaña perfectamente una fotografía que se hizo viral por unos pocos días. En ella dos simples empanadas se ofrecían sobre unas pocas hierbas dentro de un frasco utilizado de alguna vieja conserva. La imagen para un argentino es extremadamente cómica pero no deja de ser un ejemplo visible de lo que ocurre en los restaurantes de moda en ciertas zonas de la Ciudad de Buenos Aires en Argentina y en muchos otros lugares del planeta.

Tal es así que existe una cuenta de twiter dedicada a difundir las locuras de presentación culinaria que tienden a extraer del bolsillo del comensal más dinero del debido basándose exclusivamente en la originalidad del plato, o mejor dicho de la inexistencia de él, WeWantPlates  se autodenomina como una cruzada mundial contra el servicio de alimentos en pedazos de madera, pizarras de tejado, chips en macetas y bebidas en frascos de mermelada.

Así es que cuando pensábamos que nos habíamos acostumbrado a las bebidas en potes de mermelada y otros inventos "cool" de la gastronomía, llegó la empanada en frasco para sacarnos de quicio. Y no está sola. En Palermo y otros barrios de moda en todo el mundo, florecen inventos rarísimos que arruinan la comida antes de que la podamos probar.

Para un bar del Reino Unido, un shot de expreso bien puede reemplazarse por un expreso en tubo de ensayo. El que posteó la foto en Twitter fue claro en su veredicto: "mi amigo pidió un café fuerte negro y nunca estuve tan enojado en mi vida".

Un restaurante premiado en San Francisco no usa las tablets como menú, sino como platos donde servir su comida. Las croquetas de trufas blancas interactúan con un video que se muestra en la pantalla.

Que los huevos revueltos lleguen en su sartén a la mesa es ligeramente aceptable. Pero, ¿una pala de jardín? Visto en Barcelona, indignando al mundo entero.

Un hotel sirve el clásico inglés Shepherd's Pie (Pastel de carne argento), adentro de un chopp de cerveza. La pregunta es si los platos se usan para tomar la birra.

Un restaurante lujoso de Las Vegas se animó a lo que nunca nos dejaron hacer: poner los pies sobre la mesa. Y fue más allá con sus croquetas servidas en zapatillas.

Pero también se puede llegar a extremos rayanos en el mal gusto, como el caso de este postre servido en Japón sobre toallas íntimas.

La cosa es que hemos llegado a tales extremos que mi amigo Fernando Santos ha decidido incluir en su parrilla al paso frente a la cancha de Racing, esta presentación que no sabemos bien como recibirán los hinchas y especialmente los barras bravas. El choripan en copa.

Como sea, seguro que cualquiera de estos platos cuenta con precios cercanos al robo en descampado, tan sólo por no contar con un simple y querido plato.

Taluego.


Aquí algunos códigos de la gastronomía argenta para impresionar a la gilada.

Colchón de hojas verdes o Fino colchón de hierbas es algo de lechuga un poco de rúcula o lo que el verdulero dijo que estaba en época.

Minibife viene a ser un pedacito de carne mínimo que te deje con ganas y así tengas que consumir el postre.

Papas rotas son aquellas que se hacen sin utilizar cuchillo y dicen que mantiene todo el almidón. Si te gusta el almidón son deliciosas.

Papas rústicas son esas fritas gordas y feas que resultan de las pocas ganas que tenía el ayudante de cocina de pelar las papas. Apenas lavadas y al aceite hirviendo si le queda un poco de tierra te la cobran aparte.

Papines o papas de maceta o de hidroponia, por lo general quedan bien en una ensalada con tomates cherry y nada más.

Pulpetines son albóndigas realizadas con los restos de minibife del día anterior.

Timbal de arroz es el arroz glutinoso que encuentran olvidado en el fondo de la heladera y mantiene la forma del recipiente en el que se lo guardó.

Finger food es la comida que se puede tomar con la mano pero que igual te cobran el cubierto.

Raw food es algo así como comida cruda. Es la que deberían servirte en el plato de tu mascota.

Slow food como lo dice la palabra requiere que mastiques veinte veces antes de tragarla.

Food truck son esos containers con ruedas que andan por las calles pero por lo general están estacionados en el frente del restaurant porque ningún cheff quiere que lo vean cocinando en la calle.

Brunch es comida que no es comida. Una tostada con un tomate y salmón crudo, algo que no sabés si comerlo de cena o de obituario.